Pedro Simón pregona echando la mirada atrás y mostrando su amor por el Carnaval

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Pedro Simón, conocido ferretero ya jubilado de Navalmoral vinculado al Moralo CP y al Carnaval, ha abierto oficialmente los carnavales moralos de 2016 con el Pregón de Carnaval, un pregón en el que ha repasado 6 décadas de fiesta grande morala desde la nostalgia, pero también como explicación de cómo se ha construido lo que hoy es el Carnaval del Campo Arañuelo.

El pregonero ha empezado mostrando su orgullo por serlo. Un orgullo que le ha llevado a reconocer que ser pregonero de la fiesta grande de su pueblo suponía para él realizarse como persona.

El pregón ha arrancado mostrando su amor por el Moralo CP y con una mirada atrás centrada en el Carnaval que ha empezado mediado el siglo XX, cuando las moralas andaban por las calles “ataviadas con sus preciosos mantones de Manila, guardapieses, bordados, gargantillas, pendientes…”, y aquellos lazos “siguemepollo” que todos los mozos querían deshacer. Y aquellos bailes y orquestas.

El disfraz toma la calle

Salto hasta la década de los 70 en el discurso del pregonero, momento en el que se levantó la mano por parte de las autoridades y el disfraz ocupó las calles.

Las palabras de Pedro Simón desgranaron vivencias personales, como su primer disfraz, un disfraz reivindicativo. Se vistió de preso.

Llegaron los desfiles de carrozas y comparsas, todo ello “con el sacrificio y el esfuerzo” de las peñas, recordó el pregonero.

Y llegaron los 80, momento en el que nace el gran Carnaval de Navalmoral. Nuevas peripecias personales del pregonero con su cuadrilla, casi siempre presente de forma activa en los desfiles.

Una petición y un consejo

Para finalizar, una petición y un consejo por parte del protagonista de la noche morala, la primera del Carnaval 2016.

La petición, la de conservar la fiesta grande cuidándola desde los cimientos: “Para que esta fiesta no vaya a menos tenemos desde casa, desde los colegios y desde los institutos que fomentarla, con talleres de carnaval para los niños y los jóvenes”.

Y un consejo prudente: “Las fiestas no se beben, que se disfrutan y se recuerdan”. Simón cerró su pregón con un interminable ¡Hala Moralo! que enardeció a los presentes. A partir de ahí, ¡vía libre para el Carnaval de 2016 en Navalmoral de la Mata!

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