Pasacalles Carnavalero masivo, variado, desenfadado y crítico

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La noche del lunes en la fiesta grande de Navalmoral de la Mata es la noche del Pasacalles Carnavalero, la versión más lúdica, desenfadada y crítica de los desfiles que se pueden ver en las calles moralas. Y en la edición de 2016, más masiva, ya que el número de participantes en la comitiva excedió cualquier expectativa.

Se desfilaba en sentido inverso a los desfiles del domingo y el martes. Es decir, moviéndose hacia la Cruz del Rollo. Mucho público en las calles, ausencia de lluvia y diversión asegurada desde una cierta anarquía.

Desfilaron peñas de Navalmoral, pero también de Talayuela, Saucedilla y Majadas de Tiétar.

“El Arca de Noe” de Arco Iris abría el desfile con sus jugadores de fútbol americano y sus cheerleaders, justo 24 horas después de la disputa de la Super Bowl.

A partir de ahí se pudo ver de todo. Desde la ya clásica fauna carnavalera (monos, leopardos, peces…) hasta bebés, momias en sus sarcófagos, un jeque árabe, un carrito de helados, paraguas con ojos, submarinistas, un Georgie Dann muy animoso, aves y aviadores, nubes, globos aerostáticos con mensajes críticos, Tortugas Ninja, máscaras de Lego, toreros, policías, peines gigantes, guitarras eléctricas rosas, vaqueros, banderas de infinidad de países… y el Gran Circo de la peña Sinapismo, que incluía una pequeña carpa y un forzudo levantando peso. Todo ello cerrado por el hormiguero de “Vértigo”, con el que se acababa el pasacalles.

Deportistas, músicos y críticas

Espectacular la apuesta protagonizada por la numerosa presencia de deportistas de muchas disciplinas bañados en oro de arriba a abajo. Incluía futbolistas, baloncestistas, tenistas, gimnastas, especialistas de tiro al plato, nadadoras, skaters, golfistas, jugadores de béisbol y de fútbol americano, estrellas de equitación, ciclistas… con sus podios y todo.

Se pudo ver también a estrellas de la música. Un Sabina cantando en playback arengando a una troupe musical en la que no faltaban Kurt Cobain, Elvis o grupos como Village People o Kiss. También andaba por allí Conchita Wurst.

“Mesegueros” mentando el cambio climático, peñas criticando la situación política de España (especialmente elegante “Tito Fran & Akoplaos con su necesidad de salir volando del país) y más de una reivindicación alusiva a la petición de que el Hospital Campo Arañuelo cuente con una UCI. 

En este sentido, se pudieron leer carteles reivindicativos entre disfraces de médicos, enfermeras, pacientes, una mujer embarazada, sillas de ruedas, goteros, muletas y medicamentos divertidos y muy subidos de tono.

En definitiva, largo y masivo Pasacalles Carnavalero, un desfile nocturno que crece año a año.

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