La Unidad II de la Central Nuclear de Almaraz (CNA) se acopló a la red eléctrica nacional el 16 de diciembre tras concluir su 23ª recarga de combustible, según ha informado hoy la planta almaraceña.
La recarga supuso la contratación de más de 1.200 trabajadores que se sumaron a los empleados de plantilla de la factoría nuclear y en ella intervinieron más de 70 empresas especializadas, la mayoría extremeñas.
Se han llevado a cabo 9.000 actividades, implantándose modificaciones de diseño vinculadas con los compromisos adquiridos por la central con respecto al Consejo de Seguridad Nuclear (CSN).
Algunos de los trabajos más importantes han sido la inspección por ultrasonidos de las penetraciones de la tapa de la vasija del reactor, la inspección visual de dicha vasija y la de las zonas roscadas de la brida, pruebas de estanqueidad del recinto de contención, pruebas de toberas del sistema de rociado y la sustitución del juego de dosímetros de acuerdo al programa de dosimetría neutrónica exterior de la vasija.
Durante la recarga y los trabajos de mentenimiento no se ha registrado accidente alguno con baja, destacando los propietarios de la instalación la asunción de los mayores estándares de calidad y seguiridad laboral.