Son las 20:34. Estación de tren de Plasencia. El convoy con destino a Madrid llega a la capital del Jerte con 10 minutos de retraso. Los vagones acumulan pocos viajeros. Nada que ver con este mismo tren ayer, 1 de enero, el tren que dejó tiradas a 150 personas en plena noche muy cerca de Navalmoral de la Mata.
Navalmoral Digital está a bordo del tren de la flota que tiene enchufes. Un auténtico lujo. Porque gran parte de los trenes que circulan por Extremadura ni siquiera tienen enchufes en los asientos. Puro siglo XXI.
Estamos en el segundo día de 2019 y la red ferroviaria extremeña ya ha acumulado dos incidentes en sus vías. Nada ha cambiado respecto a 2018. Bueno, sí, algo ha cambiado: ¡El precio del billete se ha encarecido!
Mismos desastres a mayor precio. Ahora, el viajero tiene que pagar algo más por arriesgarse a que el tren le deje tirado en cualquier sitio.
El viaje que afrontamos esta noche cuesta prácticamente un euro más el 1 de enero de 2019 que el 31 de diciembre de 2018. Plasencia es un punto más o menos intermedio en este trayecto que empezó en Badajoz y termina en Madrid.
Un euro en el trayecto Plasencia-Madrid puede parecer poca cosa (ahora el billete cuesta 29,10 euros). Pero resulta lamentable pensar que el precio del pasaje aumenta mientras los problemas en esta línea no se solucionan. Es como reírse del personal.
A la hora de escribir esta información el tren sigue circulando con algo de retraso. Los viajeros hablan del incidente de ayer. Los profesionales de Renfe tienen que soportar más de una mala cara, ya sea en las estaciones o en los vagones. Esperemos que la cosa termine mejor hoy.
