Noche mágica por excelencia la que acabamos de dejar atrás, con las ilusiones de muchos niños cumplidas gracias a la visita de los Reyes Magos, que anoche desplegaron toda esa magia por distintos puntos de Navalmoral.
Sus majestades estuvieron con las personas más delicadas que precisan de un mayor apoyo. Visitaron así la Residencia de Ancianos María Ángeles Bujanda y el Hospital Campo Arañuelo.
Luego llegó el plato fuerte: su desfile por las calles moralas.
Corren tiempos distintos en los que la Cabalgata de los Reyes Magos ha incorporado a personajes ajenos a la tradición, personajes populares para los más pequeños, pero así ha sido como se han nutrido las tradiciones durante toda la historia.
Los Reyes de Oriente se detuvieron en el belén viviente impulsado un año más por el grupo El Encinar y recibieron las llaves de la ciudad de manos de la alcaldesa, Raquel Medina.
Luego, cuando el desfile acabó, llegó el momento de irse a la cama y aguardar el regalo (esperando que hubiera poco carbón).
