La Guardia Civil avisó en la madrugada del domingo a la Policía Local de Navalmoral tras ver cómo un conductor conducía en estado de embriaguez su vehículo por encima de la acera y sin luces.
Los agentes pudieron comprobar cómo el conductor, un vecino de Navalmoral de 30 años, presentaba signos evidentes de estar bebido: habla balbuceante, dificultad para andar y ojos vidrioso, según el parte policial.
La prueba de alcoholemia practicada por la Policía Local reveló que el joven cuadruplicaba la tasa de alcohol máxima permitida por la normativa. En una primer control dio 1,06 miligramos de alcohol por litro de aire espirado y en una segunda prueba 0,96, por lo que tendrá que ir a juicio rápido.
Los hechos ocurrieron a las 4:30 de la madrugada del domingo en la calle Jorge Moro.