Hoy se ha escenificado el relevo al frente de la central nuclear de Almaraz. Porque hoy se ha hecho oficial el traspaso de poderes: José María Bernaldo de Quirós deja de ser director de la central nuclear y Rafael Campos es su sucesor en el cargo.
Bernaldo de Quirós ha estado 17 años dirigiendo la central nuclear (y muchos más años ligado a la planta antes de ser director).
Su sucesor ha alabado el excelente legado que deja su predecesor. “Me he encontrado un equipo de gente joven y una central que está totalmente renovada”, ha afirmado.
Campos y Bernaldo de Quirós han estado trabajando mano a mano durante 4 meses, tiempo en el que se han solapado en el cargo para facilitar un relevo fructífero, un relevo que se hizo efectivo el pasado 2 de abril.
Bernaldo de Quirós ha tenido palabras de halago para el nuevo director, del que ha dicho que es “un profesional estupendo”.
El nuevo director
Rafael Campos es aragonés, tiene 45 años, es licenciado en Ingeniería Superior Industrial en la especialidad de Ingeniería Energética rama nuclear por la Universidad Politécnica de Valencia y ha trabajado en la central nuclear de Cofrentes, donde ha ejercido como director entre 2014 y 2017. Es decir, ya tiene experiencia en dirigir una planta nuclear.
El debut de Campos en Almaraz va a resultar exigente, ya que se va a enfrentar este año 2018 a dos recargas de combustible. Una está ya en curso, la de la Unidad II, y la otra, la de la Unidad I, llegará en noviembre.
“Está siendo un año muy intenso”, ha reconocido el nuevo director de la central, que ha asegurado que “por encima de la producción está el valor social”.
Campos ha hecho hincapié en su apuesta por la fiabilidad y la seguridad de las personas, por el cuidado del entorno y del medio ambiente.
